En la FIP creemos que pensar la paz es el mejor camino para construirla y actuar nos permite transformar realidades. Nos conectamos con los territorios implementando iniciativas innovadoras que buscan fortalecer capacidades institucionales y ciudadanas. Ponemos un énfasis especial en las zonas más afectadas por la violencia, donde el Estado es frágil y hay fuerte dependencia de economías criminales.